Ciudad de México, 6 de noviembre de 2020. Estamos en una encrucijada por las agendas en materia energética de los candidatos presidenciales en Estados Unidos, por lo que dependerá de los resultados, si México replantea o no su estrategia energética, comentó Ramón Basanta, Director Ejecutivo de ATCO Energy, compañía que provee energía, servicios de consultoría y certificados de energía limpia.
“Joe Biden y Donald Trump, tienen agendas opuestas. Trump tiene una agenda muy conservadora y busca fortalecer la industria del petróleo y gas en Estados Unidos, mientras que Biden se enfoca más en energías renovables y cambio climático”, expresó Basanta en entrevista para Arzate Noticias.
Agregó que si gana Biden, México tendrá que redirigir y ajustarse a esta integración del bloque norteamericano y hacerlo a través de energía renovable, pero si gana Trump mantendrá su política muy redireccionada hacia la refinación.
Agregó que la demanda de electricidad en el país se encuentra muy saludable, puesto que las industrias y la población la requieren. Señaló que “El crecimiento de México está atado a la electricidad y a una electricidad competitiva”, por lo que al cuestionársele sobre la postura del gobierno actual en materia eléctrica comentó que “El presidente está viendo la forma de proteger instituciones como CFE y PEMEX, lo cual no está mal, ya que muchos países lo hacen. Creo que fortalecer CFE es una buena decisión para seguridad nuestra. Lo que es necesario es que las compañías privadas puedan participar en el mercado porque son los que traen inversiones fuertes, y en lugar de que el Estado Mexicano arriesgue, sean las empresas privadas las que traigan la inversión, además son las que cuentan con los últimos avances”.
Recalcó la importancia de que las reglas del juego se mantengan y no estén cambiando ya que esto permitirá que los inversionistas tengan certidumbre en los proyectos a desarrollar.
Por último y al hacer referencia a la transmisión y distribución de la electricidad, señaló que con la última reforma energética se mantuvieron estas tareas como funciones estratégicas del Estado Mexicano, pero considera que es necesario modernizar todo el sistema de cableado y manejar una distribución inteligente, es decir, aprovechar toda la tecnología posible para hacer el proceso más efectivo y eficiente y poder ver como consumidores, un precio de la electricidad mucho más bajo.