San José del Progreso, Oax., 26 de junio, 2023.- – Flores y figuras de todos los tamaños, formas y colores son deshiladas, tejidas y bordadas a mano, con paciencia y concentración, en lienzos que se convierten en blusas, guayaberas, camisas, vestidos y otras prendas por más de 30 artesanas que expenden sus productos en el centro de San José del Progreso, Oaxaca.
Aproximadamente a una hora de la capital de Oaxaca, en la región de los Valles Centrales, las hermosas y coloridas prendas llaman la atención de quienes recorren San José del Progreso. Ahí, en un pequeño mercado, con puestos de madera, localizado en el centro de esta localidad con poco más de 8 mil habitantes, están las Artesanas del Progreso…bordadoras de prendas y de sueños.
Son mujeres que por generaciones se han dedicado a la confección de creaciones que son parte de la diversidad de colores que pintan el lugar. El entusiasmo y alegría con que hacen cada puntada, da origen a piezas únicas.
Algunas de ellas empezaron a tejer desde niñas. Un bastidor de aros sencillos de madera y 20 técnicas de deshilados nuevos y antiguos, han sido el medio para plasmar su visión de la vida que exhiben en el mercado, donde las personas pueden llevarse estas prendas coloridas y originales a precios que van desde los 300 hasta los 2 mil pesos, dependiendo del tiempo que les demore producirla cada pieza.
Todo tiene un inicio
En un comienzo, las artesanas trabajaban de forma independiente, así que tenían pocos canales de comercialización y sus ganancias eran menores, pero antes de la emergencia sanitaria por el COVID-19 decidieron organizarse para impulsar su arte y posicionar al municipio con el lugar donde están las mejores deshiladoras de Oaxaca.
Con el apoyo de Compañía Minera Cuzcatlán y el ayuntamiento de San José del Progreso, las Artesanas del Progreso han tenido un trampolín que les ha permitido ir alcanzando su sueño: compartir su trabajo con más personas.
La minera que opera de manera comercial desde hace 12 años en este municipio y el Ayuntamiento apoyaron en la construcción de los puestos y promueven su participación en ferias, exposiciones y pasarelas.
Pero no sólo participan mujeres jóvenes señoras y personas de la tercera edad, el grupo es diverso e inclusivo: Con ellas está Christopher Hernández. Viste una guayabera blanca con tiras bordadas de flores de colores tejidas. Sentado en una silla de ruedas porta en sus manos un bastidor azul y no deja de bordar con tal rapidez que parece haber nacido con ese don.
Su mirada sólo se despega el lienzo para platicar su historia: “mi mamá y mi familia siempre se han dedicado a bordar y deshilar, pero nunca habían terminado una prenda. Mi fin fue vender el bordado y deshilado y dedicarme a esto”, dice mientras sonríe.
El grupo ha encontrado en el lienzo de tela un medio de existencia con el que da color al municipio y sacan adelante a sus familias, elaborando prendas que portan un mensaje de felicidad e identidad oaxaqueña y sobre todo, de San José del Progreso.
Las Artesanas del Progreso saben que esta alianza se fortalecerá con más personas que hagan del lienzo y el hilo un estilo de vida, por ello, invitan a más mujeres y hombres a unirse para hacer de San José del Progreso un municipio que se reconozca en el ámbito internacional como la capital del deshilado y en un lugar donde el progreso represente una colorida primavera sin fin.