Ciudad de México, 12 de mayo, 2022.- México ahora cuenta con la primera bolsa 100% hidrosolube, la cual tiene la característica de disolverse en agua caliente en tan solo dos minutos, esto gracias a que es producida con la tecnología BeNat, misma que permite que se integre al entorno como composta y sin causar impactos negativos en los ecosistemas, ya que no contiene plásticos ni químicos.
BeNat es una nueva tecnología creada para dar respuesta a los problemas de contaminación porque emplea almidones vegetales como materia prima para su obtención. Además, es amigable con el medio ambiente ya que para su proceso de producción no se require del uso del agua.
“El uso de materiales orgánicos permiten que la bolsa pueda biodegradarse en menos de 180 días y, por tanto, integrarse al entorno de manera natural y sin causar daños a la flora y la fauna”, acentuó Francisco Santamaría, vocero de la marca.
Y es que la bolsa compostable tiende a convertirse en un tipo de gelatina al entrar en contacto con el mar –uno de los ecosistemas más afectados por estos residuos mal gestionados—y sin ahogar a los peces en caso de ingesta.
Santamaría dijo que desde hace años se ha tratado de crear conciencia sobre el grave problema de la contaminación de plásticos e incluso en México se puso en marcha una normativa para su prohibición a partir de 2020, pero la situación continúa día con día.
De ahí que la tecnología BeNat apuesta a los productos amigables con el medio ambiente y las técnicas con tendencia ambiental, pues “estamos seguros que serán líderes en el corto plazo y dentro de un nuevo mercado con potencial de crecimiento”.
Las bolsas hidrosolubles son el primer producto compostable con certificación emitida por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) de Jalisco, lo que resulta favorable para la biosfera y la biodiversidad, en particular con las especies catalogadas en peligro de desaparecer, subrayó.
El producto es compostable, es decir, que si se tira con más elementos con los que se forma la composta, se integra de manera natural. “Este beneficio representa ahorro, salud y armonía ambiental”, enfatizó.
Lo anterior sucede porque la bolsa muere como muere una planta, que después se “fusiona” con la superficie y pasa a formar parte de ella en forma natural, explicó el vocero de BeNat.
Aunque los atributos de la bolsa van enfocados a beneficiar a los ecosistemas, refirió que ésta es también resistente, elástica, indeformable y soporta hasta 15 kilogramos.
“Son características que permiten su utilización en la mayoría de las necesidades de carga ligera de los usuarios”, acotó el experto, quien destacó que la bolsa hidrosoluble cumple con la normativa vigente de la SEMARNAT de Jalisco y tiene los permisos necesarios para su uso comercial.
“Los usuarios y las empresas pueden confiar en que están usando un producto amigable con el medio ambiente, lícito y recomendado por las autoridades ambientales de nuestro país”, reiteró.
Dejo en claro que la salida de bolsas de plástico y la aparición de nuevas opciones han venido a cambiar, de manera paulatina, los hábitos de los consumidores.
De acuerdo con el estudio KP Investiga, el 66% de las personas lleva una bolsa reutilizable cuando asiste al supermercado, tiendas de abarrotes, mercados o mini súpers. En tanto que el 33% espera hacerlo, aunque a veces lo olvida. “Esto, definitivamente, representa una nueva costumbre en las compras de la despensa para casa”, añadió.