*La producción de insumos médicos supera los 14 mil 700 mdd; esperan se incremente 4.5% al concluir 2021
Durante la pandemia uno de los sectores que jugó el papel más importante fue el de los insumos y dispositivos médicos, porque al principio se requerían cubre bocas, caretas, ropa hospitalaria, alcohol en gel, después comenzamos a ver una alta demanda en diagnóstico clínico, así como demanda en concentradores de oxígeno, lo que llevó a que la capacidad de manufactura se sobrepasara, comentó Carlos Salazar, presidente de la Asociación Nacional de Proveedores de la Salud (ANAPS).
Comentó que a lo largo de este tiempo el mercado de empresas dedicadas a la venta de insumos médicos tuvo un crecimiento exponencial, ya que antes de la pandemia se tenían registradas entre 2 mil 800y 2 mil 900 empresas, hoy día existen 3 mil 800 formalmente registradas para la venta de dispositivos médicos.
Además, surgieron varias crisis como consecuencia de que los hospitales se enfocaron en la atención a la COVID-19 dejando en un segundo plano la atención de otras patologías, como la ortopedia, traumatología, cirugía estética y todo lo que tiene que ver con el sistema hospitalario que comenzó a postergarse.
“Más del 45 al 50 % de las camas hospitalarias se enfocaron en tema COVID y hubo un momento en que llegó a más del 70%, sin embargo también la gente dejó de acudir a los hospitales, por lo que ha sido todo un reto ya que si bien tuvimos una hiperdemanda de atención para pacientes COVID, ahora vemos una transición totalmente encarrilada a la inversa enfocada en productos de cirugía y otros tratamientos que se postergaron y que hoy son causa urgente e inmediata, por lo que el sector se está reactivando”, indicó el directivo.
Cabe señalar que el mercado de insumos médicos ocupa un lugar importante dentro de la economía, ya que en 2020 México se posicionó en el 8vo lugar como exportador de dispositivos médicos en el mundo, mientras que durante 2021 prácticamente alcanzó el lugar número 7, liderados con países desarrollados como Estados Unidos y China.
“Al ser vecinos del principal país consumidor de insumos médicos, como lo es Estados Unidos, hemos logrado armar una industria de manufactura sumamente importante, teniendo una producción total en 2020, que supera los 14 mil 700 millones de dólares y esperamos que se incremente un 4.5% en 2021”, comentó Salazar.
En cuanto a las exportaciones, indicó que suman 10 mil 100 millones de dólares, aunque se piensa que el crecimiento puede ser muy mesurado debido a problemas de abastecimiento de materias primas, polímeros, plásticos, chips, entre otros. “Mientras que en importaciones traemos unos 5 mil 200 millones de dólares y esperamos crecer un 5.7 % para este 2021”, indicó.
En cuanto al consumo nacional aparente, o lo que es el tamaño total del mercado, se lograron 9 mil 800 millones de dólares en 2020 y ahora esperan lograr los 10 mil 500 millones de dólares, superando un 6.67% del año pasado
“Para el sector de insumos médicos, abastecemos no sólo el norte del país, sino también América Latina, ya que representamos el 70% de todas las exportaciones de la región”, enfatizó.
Señaló que: “El sector de insumos médicos nacional juega un papel importante en la economía mexicana, ya que si bien ha logrado abastecer a un mercado tan demandante como lo es el de Estados Unidos, y nos utiliza como maquiladores de marcas americanas, creemos que estamos en el momento idóneo para detonar toda esta experiencia y desarrollar marcas mexicanas”.
También comentó que en la franja fronteriza se encuentra una industria importante de manufactura siendo Chihuahua la que lidera la producción de dispositivos médicos, seguida por Tijuana que ocupa el segundo lugar.
Al referirse a los cambios regulatorios, comentó que es necesario trabajar en conjunto con el gobierno, la industria hospitalaria y de proveeduría para entender cuáles son las necesidades de la demanda en México y traer soluciones más eficientes.
“Hoy día nos vemos involucrados en la falta de claridad en las reglas y los procesos administrativos, seguimos en el proceso de aprendizaje. El gran reto se encuentra en la planeación conjunta de tres ejes: quien ejecuta la demanda (sector hospitalario), quien administra (gobierno federal) y por supuesto quien provee los insumos”, enfatizó.
“Esperamos trabajar en conjunto en esta planeación y poder lograr que en 2022, que el reto de suministro y abastecimiento médico no solo sea del gobierno federal sino que sea una participación de los tres ejes mencionados”, concluyó.