Ciudad de México, 05 de octubre, 2021.- El Estado debe recuperar la rectoría del sistema de salud en México y reducir la subrogación de servicios, que al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) le cuesta alrededor de ocho mil millones de pesos al año, afirmó el director general de este organismo, Luis Antonio Ramírez Pineda.
Reveló que es el reto principal que enfrenta el gobierno de México y dijo que el sistema de subrogación de servicios no beneficia a la derechohabiencia, ni en calidad, ni en eficiencia.
Durante su participación en los Conservatorios para la Promoción de la Salud en el Senado de la República, donde estuvieron la presidenta de la Mesa Directiva, Olga Sánchez Cordero; el presidente de la Comisión de Salud, Américo Villarreal Anaya, entre otros invitados.
Ramírez Pineda destacó que con el liderazgo del presidente Manuel López Obrador trabaja en conjunto para modificar el enfoque de salud de un modelo curativo a un modelo preventivo, así como para recuperar la rectoría del sistema de salud.
Estamos trabajando de manera coordinada para incrementar el intercambio de servicios entre la Secretaría de Salud, el IMSS, ISSSTE, Sedena, la Armada de México y demás instituciones públicas prestadoras de servicios, con ello aprovechar infraestructura y personal en cualquier rincón del país y reducir costos para garantizar el acceso a la atención médica en México, tal como se ha hecho para enfrentar la COVID-19.
“Es necesario mejorar los esquemas de estandarización para el aprovechamiento de los recursos de salud con los que contamos como nación”, puntualizó.
Ramírez Pineda resaltó que otro reto en el ISSSTE y en el sector salud es desarrollar y potencializar la formación de médicos y enfermeras. “A nivel nacional somos deficitarios de personal de salud”.
Exhortó a las universidades a formar nuevas generaciones enfocados en especialidades relacionadas con los padecimientos de nuestra población.
En el caso del ISSSTE, se está ampliando el número de médicos de residencia y las sedes para los programas de formación de especialistas para fortalecer el primer nivel de atención, diagnóstico oportuno y control de pacientes con enfermedades crónico degenerativas.
Comentó que entre los retos y acciones del gobierno de México para fortalecer los servicios de salud, está el generar incentivos para que el personal médico se movilice a zonas rurales y marginadas de México, asegurando el acceso a quienes más lo necesitan.
Además, se invertirá en un Centro Nacional de Vacunas, “el sistema de salud pública debe de tener la capacidad de producirlas para atender las necesidades de salud de su población. En la actualidad la mayoría son elaboradas por farmacéuticas extranjeras, lo que nos hace altamente dependientes”.
Ramírez Pineda detalló que la pandemia ha retrasado metas y objetivos de salud de todos los países y adicionado nuevos desafíos, “pero también nos ha dotado de herramientas y capacidades para enfrentarlos”.
“Por ello, es importante procurar en estos espacios de diálogo que resultan una gran oportunidad para conectar a los especialistas en materia de salud con quienes tienen la encomienda de vigilar y construir políticas públicas. Estoy seguro que será de gran beneficio para promover la salud de forma innovadora y con una visión humanística”, destacó.